A ANIQUILAR A LOS GUSANOS

 

Orientales:

En el amanecer de hoy, aviones mercenarios pagados por el criminal imperialismo yanqui, acaban de bombardear el aeropuerto de Santiago de Cuba, “Antonio Maceo”. No hemos tenido que lamentar muchas bajas, aunque las bajas de los hijos de Cuba es lo que menos importa en estos momentos. De la misma forma, en otras ciudades de la Isla aviones mercenarios han hollado el suelo de la Patria con bombas del imperialismo yanqui. ¿Y qué quiere decir esto? Que llegó el momento para todos los cubanos de empuñar el arma para liquidar a los gusanos viles que intentan hollar la Patria sagrada.

Orientales, milicianos, miembros del Ejército Rebelde:

Acudid a movilizarse, cada jefe de unidad, de milicia o de ejército, que se presente en el lugar donde se conservan las armas, en forma ordenada y serena. Cada uno a ocupar su puesto. Cada uno a empuñar el rifle con el que tendremos que pagar el precio de nuestra libertad. Como primer paso, cada uno a ocupar el mismo sitio de cuando la movilización de enero, en forma ordenada y serena. Que la producción debe mantenerse lo más alta posible. Que la CTC convoque a la movilización inmediata sin dejar de producir. Que de la Federación de Mujeres parta la consigna de ocupar sus puestos. Que los jóvenes rebeldes también, a pesar de su tierna edad, deben empuñar el rifle para salvar la Patria. Todos a ocupar sus puestos. El enemigo ha atacado. Vamos a aniquilar al enemigo y a la reacción interna, los traidores internos, dondequiera que se manifiesten aprovechando estos momentos, con la confusión que pueden haber sembrado con el ataque artero y traidor. A aniquilarlos allí mismo, donde hagan manifestación de actos contrarrevolucionarios. A aniquilar a los gusanos. A cumplir la palabra empeñada con nuestros muertos, con nuestros hijos, con América y con el mundo. A aniquilar al invasor.

¡Patria o muerte!

¡Venceremos!

                                                                                                                     COMANDANTE  RAÚL CASTRO

 

Exhortación leída a través de las emisoras de radio de Santiago de Cuba. En Bohemia, 23 de abril de 1961.